Boletín de Prensa 08/25/2015
EL CAMPO ES MILAGRO DE DIOS Y ESTÁN VIVIENDO DE MILAGRO. DIPUTADO JOTA JOTA.
Después de los datos del censo agropecuario, a nosotros, todos, absolutamente a todos los que hacemos parte del estado nos debiera dar pena. Diputado jota jota.
El presidente Juan Manuel Santos se sorprendió al conocerlos. Tras escuchar el informe dijo que “falta todo por hacer en el campo” y agregó que se debe acelerar una reforma integral. Para el ex ministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo, gran impulsor del censo, los primeros resultados muestran el atraso del sector y validan lo dicho en el punto número uno de las negociaciones de paz de La Habana, sobre la necesidad de una política de bienes públicos que ayude a llenar el bache entre lo rural y lo urbano. Según el censo, el índice de pobreza multidimensional en el campo es del 44,7 por ciento, el doble del registro total nacional, que para 2014 estaba en 21,9 por ciento y casi tres veces el urbano que se ubicaba en 15,4 por ciento. El censo también mostró que el área rural se caracteriza por un bajo nivel de capitalización. El 83 por ciento de los productores declaró no contar con maquinaria y un porcentaje igual dijo no disponer de infraestructura agropecuaria. Igualmente, se evidenció la baja solicitud de créditos y la poca asistencia técnica para las actividades agropecuarias. El 90 por ciento de los productores afirmó no recibir ninguna. Este fue uno de los aspectos que más lamentó el presidente Santos, pues afirmó que “si no hay asistencia técnica nunca vamos a lograr el objetivo de ser productivos, competitivos y eficientes”. Para el ex ministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo, gran impulsor del censo, los primeros resultados muestran el atraso del sector y validan lo dicho en el punto número uno de las negociaciones de paz de La Habana, sobre la necesidad de una política de bienes públicos que ayude a llenar el bache entre lo rural y lo urbano.
Otro dato que llama la atención es que en la última década envejeció la población rural. Esto muestra que la fuerza de trabajo joven está abandonando el campo, porque no ve allí posibilidades de futuro. Si las condiciones de vida y las expectativas fueran más positivas en el sector rural, muchos jóvenes querrían seguir los pasos de los padres.
También se observa que en la última década aumentó la participación de las mujeres como jefe de hogar en el campo. Subió a casi el 28 por ciento, frente al 18 por ciento que había en 2005. En general, el 23,7 por ciento del total de trabajadores de las unidades de producción agrícola permanente. Estos resultados revelados por el DANE son un primer avance del censo, pues al final del año estarán disponibles los micro datos que permitirán llegar a más detalles y conclusiones sobre el campo. Por ahora, lo más importante es que el gobierno tiene un diagnóstico más real de la situación del sector rural para lanzar las políticas públicas que se requieren. Esto será fundamental en el posconflicto pues, como dijo Santos, Colombia tiene que volcarse hacia el campo si quiere ser un país con más equidad y en paz.( revista semana).